Nunca me imaginé que las cosas podrían cambiar. Hay momentos en la vida (estoy seguro que a muchos les pasa) en que piensas que todo seguirá igual y que las cosas no cambiarán, pasa que sí, sí cambian.
Es cosa de que dejes que las cosas decanten. Sanarás, de verdad que sí. En el fondo, cuando suceden cosas en tu vida, esas cosas deben ayudarte a crecer y aprender, así de simple. Lo importante es aprender.
¿Para qué nos caemos? Para volver a levantarnos. Aunque eso no impida que quedes con un par de rasguñones, pero sanarán, ya verás.
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