lunes, 10 de enero de 2011

Se mueve la cortina frente a mis pies

... Y siento como podría disfrutar ese pequeño momento de tranquilidad, ese instante del no pensar estando contigo. Sé que no me aceptas, ni que me ves como desearía, pero... lo pienso.

Es corto momento en que te imagino abrazada a mi lado, acariciando mi pecho lentamente, es cuando más feliz me siento de que, al menos, te idealice unos nanosegundos. Luego, paso a seguir disfrutando como el viento se entrecruza por mis dedos y el Sol comienza a aquietarse.

Es lo último antes de darme vuelta y querer que estuvieses en frente de mi...

domingo, 9 de enero de 2011

Buen empujón.

Todas esas dudas que tenía a fines de este año, que me hacían reflexionar sobre la fomra en que te pueden valorar, se han calmado: las cosas están resultando.

Creo que la única gran enseñanza de todo esto es que debes luchar: no importa si al final pierdes, intentalo, sea lo que sea, intentalo. Puedes arrepentirte luego de muchas cosas que pudiste haber cambiado.

Es un buen empujón para empezar el año. Al menos uno en que todo comienza tranquilamente... por ahora.

viernes, 31 de diciembre de 2010

2010

Se acabó. Un año que no me dejó planear muy bien las cosas. Sobre todo por el accidente que tuve en enero pasado. Eso me mató más de 2 meses y aún tengo secuelas. Creo que la cojera no es fácil de superar...

Lo que pasó, me demostró que pocas son las personas que realmente se preocupan. Otras, ni siquiera estuvieron ahí. Fuera de eso, conocí, sin esperarlo, a algunos apoyos que me sirvieron para seguir adelante, ante algo que muchas veces se me escapaba de las manos.

Luego, las cosas solamente se dieron porque sí. Nada, absolutamente nada nuevo bajo el Sol. Solamente que el trabajo, en los últimos meses comenzó a ponerse más divertido. No por lo que hago, para nada, si no por los beneficios que trae. Quise mejorar las condiciones. Logré cosas, pero al parecer no las suficientes. Y en eso estoy (aún). Algo que puede que cambie radicalmente...

Todas esas decisiones no las tomé con apoyo de nadie. Solo. Como hace tiempo no lo hacía. No necesitaba a nadie imperiosamente para resolver mis problemas, las cosas estaban saliendo solas. Ya no necesitaba que estuviera ahí...

Y me fui ensimismando en la soledad. Al final, solamente existía yo. No desde un punto de vista egoísta, todo lo contrario. Fue el hecho de que ya nada me rodeara. Y eso, no lo planee...

Así de raro se fue desarrollando el año. Hubo tranquilidad, estabilidad, pero siempre recuerdos, los qué tal sí y cosas parecidas que no te dejan ser al 100%...

Y personas que van y vuelven...

Cosas buenas hubieron, sin duda. Pero la mayoría de las veces, la rutina las consumía. Eso no lo quiero. Vade retro, rutina! Eso quizás cambie tarde o temprano. Es por eso que pienso planear mejor las cosas para el año venidero. Acabar con la soledad, reafirmar situaciones, volver más firmes y definitivas mis decisiones y jugarmela por mi. Ya no por lo que desee rodearme.

Así debe ser.

jueves, 30 de diciembre de 2010

Cambio de dirección

Pensé que al final, mis planes de crecimiento iban bien. Todo estable, todo de a poco. Pero, creo que no era así. Cuando uno se entera de ciertas situaciones, hay que tomarlas en serio y actuar, aunque modifique mis planes abruptamente. Eso haré.

No me queda más remedio que ver si encuentro una solución o simplemente cambiar todo. Fue inesperado, tal vez hasta fuerte. Pero lo bueno, es que podré actuar y fue tan inesperado!

Qué diablos. Al final del día, me encantan los desafíos así...

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Sólo una cosa me gustaría...

Que todo empezara de nuevo. Jugarmela. Perder. Superarlo. Seguir...

Sí, es más de una cosa. Pero todo va relacionado! Quisiera que las cosas fueran así, como las imagino... que hayan sido así, que eso estuviera pasando. Pero no siempre se puede tener lo que se quiere. Sobre todo, si se toman decisiones estúpidas que pueden afectar tus deseos fuertemente... Como generalmente me pasa...

Ojalá las cosas resulten mejor de ahora en adelante. Cuando todo, todo... olvidalo.

martes, 28 de diciembre de 2010

Sin Ayuda...

Sin pensarlo siquiera, alguien quiso ayudarme. A que viera lo evidente, a que me diera cuenta de que me hace mal. Me desestabiliza.

"Nunca te verá de otra forma, aléjala de ti"

Eso fue lo que me decían. Pero yo quería llevar las cosas de otra forma, aún con esperanza, aunque fuera mínima, aunque en realidad las cosas jamás llegaran a buen puerto, aunque finalmente no sacara nada con intentarlo siquiera. Quería hacer las cosas sin ayuda...

Pero siempre escucho los consejos. Si te los dan, por algo será... tal vez. Ella no lo hace de mala intención, sentí sinceridad en sus palabras. Pero quiero ver esto por mi forma.

Sufriré ante la verdad que ya conozco. Así deben ser las cosas. Lo merezco. Por dejar que las cosas llegaran hasta este punto... por dejar que mi corazón haga lo que quiera... por eso lo merezco.

Debe de ser así. Como van las cosas. Sin ayuda. Sin ayuda de nadie.

Gracias de todas formas...

lunes, 27 de diciembre de 2010

Malditos Sueños

Soñé una vez más con ella. No la vi, no la pude ver. Pero la sentí. Ese sentimiento que a la larga, me deja pensando en la nostalgia. El sueño era extraño, rozando lo bizarro. A pesar de eso, era creíble. Raro.

Era un mail tuyo. Me mandabas un mail. Que me parecería raro que te comunicaras conmigo, pero que me necesitabas. Querías mi ayuda. Y allí debía estar para ti.

Comencé a buscarte por un pasillo grande, largo... y nunca llegué a ti. Hasta que, como la vida real, simplemente desperté. Ya no estabas. La verdad, nunca estuviste: En mis recuerdos, allí siempre estás y en mis sueños también porque, fuera de todo, siempre te recordaré, aunque sea un momento pequeño en tu vida... aunque sea un instante cada 100 años...

domingo, 26 de diciembre de 2010

Quisiera decirle...

Un pequeño saludo. Solamente para saber cómo está. Pero, no debo hacerlo. Es algo que debería tener asumido. Ella no quiere saber si quiera de mi existencia. Es más, ya no sabe quién soy realmente... Para qué volverla a traer a mi vida sin necesidad...

Ella no quiere, yo tampoco debería querer. El único recuerdo que tiene de mi es más bien vago. No fui importante en su vida. Para nada.

Lo sé, lo siento.

Es lo único que me duele más de todo esto al final del día. Que no haya podido lograr ser alguien importante en su vida, tanto o casi tanto como ella para mi. Eso me duele. Pero lo dejo pasar, como solamente puedo dejar pasar las cosas que ya no son de mi incumbencia. Esta es una de ellas. No puedo pelear por eso.

Así es la vida.

Olvidé hablarle. Seguro, esta semana volveré a olvidarlo. Es mejor así. Que siga sin recordar que alguna vez existí.