Sigo sin poder salir de esto. Me pregunto, por qué te hice volver, no debí hacerlo, pero mi corazón te necesitaba, me sentía con la necesidad de que estuvieras a mi lado, de que no me dejaras solo... y estuviste.
No eres mala persona, pero tus actitudes me están destruyendo, volviéndose algo tóxico, que no quiero tener en mi vida. Sí. Odio esa palabra, no creo en que exista gente o momentos con toxicidad, necesariamente, pero esto se está convirtiendo en un circulo vicioso del cual no puedo salir y que hace un tiempo no habría querido salir...
Pero ahora, lo busco. No quiero sentir este dolor, quiero escapar de ti, no quiero volver a traerte a mi vida, quiero huir de ti, del amor, de lo que es querer, otra vez estoy atrapado en el sufrimiento de alguien que definitivamente no quiere nada de mí, solamente quiere a alguien que haga eso que tú quieres que haga: que sientes que debe ser, y si no lo hacen, si no son como tú, les recriminas, les dices que se vayan, que no tienen razón...
Lo haces con tu familia, no lo vas a hacer conmigo, que no soy nada. No quiero quererte, quisiera odiarte, lo cual sería más fácil. Pero no, es muy pronto para eso, me es muy difícil dejar de amarte y eso es lo que más odio de mí en este momento; al mirarme al espejo me desprecio, me aborrezco, como la basura que soy, que me hace sentir cada vez que te vas.
Y así es como me dejas: como una gran nada, otra vez. Pero, ¿qué fue lo que pasó?, ¿qué gatilló todo esto?
Este texto se alargó. En la 3era parte lo desahogo.
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