jueves, 17 de septiembre de 2009

Extraño no saber de ti


Me encantaría saber cómo estás. Así como también vivo de lo más bien no sabiéndolo. No sé, me confundo yo mismo. Porque cuando no te veo estoy tranquilo, pero cuando te veo... me desmorono por dentro.

Tal vez de nervios. Porque me encantaría saber de ti, cómo estás, pero no. Termino siendo frío, lejano. Porque me da susto ser más cercano. Tú sabes, tengo miedo de que se note demasiado.

Quisiera que me llamaras y riéramos como antes, habláramos horas estupideces que solamente nosotros mismos entendiéramos, tantas cosas que solamente comprenderiamos juntos. Pero no se puede. Ya no existe contacto entre nosotros, lo cual es natural, normal. Es como debe ser.

Quizás debo dejar que camines hacia el futuro que sé que te depara. El mejor de todos. Eres hermosa, la más linda... la que quiero ver bien (o al menos intuirlo).

Cuídate, porque yo nunca más volveré a saber de ti. Que seas tan feliz como desearía haberte hecho. ¿Ya?

martes, 15 de septiembre de 2009

Parece recordar....


Me parece recordar cuando fui ese día a la estación a buscarte. Me parece recordar cuando te vi de espaldas esperándome al borde de las escaleras. Me parece recordar como diste vuelta tu cabeza inmediatamente para ver si era yo quien las subía. Me parece recordar tu cara de alivio y felicidad al verme.

Me parece recordar tu caluroso y suave abrazo. Me parece recordar que nos fuimos de la mano caminando, que luego pasaste tu brazo por mi espalda fuertemente y no me soltaste. Me parece recordar que nos sentamos a conversar mucho rato. Me parece recordar que me extrañaste mucho, que me necesitabas...

Me parece recordar que seguimos caminando y se nos hizo de noche y visitamos lugares que no teníamos pensados. Me parece recordar que comimos juntos un pan. Me parece recordar que no querías que me fuera y yo tampoco.

Me parece recordar que el Metro iba lleno de vuelta y que, mientras yo tenía que ir hacia un lado, tú debías ver otras cosas por otro. Y nos fuimos abrazados, juntos, cerca. Y nos despedimos con tanto amor que todo era perfecto.

Me parece recordar que alguna vez, me quisiste y yo a ti. Aunque eso, siempre suelo recordarlo.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Barreras


Los seres humanos nacemos sin nada que nos limite los unos con los otros. Somos libres para interactuar con cualquiera que se nos cruce. Las barreras, limitaciones, espacios, los hacemos nosotros. Hay muchas razones para que esto suceda.

La más común, es porque no queremos lastimarnos. El miedo crea esas barreras. No queremos que ciertas personas se nos acerquen, o en muchos casos que nadie lo haga, porque tenemos miedo de que nos hagan daño. De que nuestra alma termine sufriendo. Ya sea porque en el pasado nos sucedió o porque vemos en nuestro alrededor como las personas se dañan unas con otras. Y eso nos duele.

Nos afecta de tal manera que finalmente creamos barreras en nuestros corazones. Definitivamente, es algo que termina siendo mucho más doloroso. Y andas por la vida cuidando que no te pase nada...

Y de paso, no hacerle daño a nadie más jamás.

No te limites tanto, no escondas lo maravillosa que puede ser tu alma. No te cierres a querer y que te quieran, aunque suene algo difícil de lograr...

Siempre hay excepciones. Siempre.

viernes, 11 de septiembre de 2009

No voy a luchar más


No se puede. Si no se puede luchar contra el pasado propio, menos se puede contra el ajeno. Simplemente, no me dan las fuerzas. O sé que voy a salir perdiendo, así que, para qué intentarlo?

Pensé por un pequeño instante, que era simplemente porque no había nada más. Porque, estaba sugestionándome a mi mismo con tal de convencerme de que sí. Pero, definitivamente, es algo que me persigue como el gato al ratón: piensan en otros, me comparan con otros. Y nunca seré como los otros, yo no soy ellos, yo no puedo ser ellos. Mierda, en mi no piensan? En el puto dolor que significa saber que...

Yo no soy él, ni él, ni ÉL... soy yo y yo no valgo nada, nada porque soy el presente mío y de nadie más, no soy parte del pasado de nadie y nunca lo seré... jamás, porque no puedo luchar contra el pasado ajeno...

Pero, está bien. Cada uno lucha con lo que puede luchar y si eso es un pasado que te marca, pase.

De ahí a que no duela, no lo puedo asegurar.

Está bien, así son las cosas, y ya me cansé sentimentalmente... me cansé, me ganaron, no vale la pena simplemente querer a alguien en el fondo de tu corazón. Como me acabo de dar cuenta que la quiero.

No debe saberlo, así será mucho mejor. Total, es todo lo que puedo dar.

martes, 8 de septiembre de 2009

Me gustaría no leer


Y hubo una vez un mail en donde me llegaban los comentarios del blog...

Y hubo una vez (más de un par de veces) en que me escribiste...

Y hubo una vez (hoy) que los leí...

Y hubo una vez en que me dolieron. También fueron hoy.

No me gusta borrar los recuerdos, eso me lo enseñaron hace tiempo. Pero duele desempolvarlos... como ahora. Como ahora en que leí algo que no recordaba y que era perfecto y que se arruinó por mi puta culpa y nada más que mi puta culpa... todo se fue a la mierda, incluso yo...

Me gustaría no leer, así, no recordaría épocas mejores. Mierda que deseo volver al pasado...

domingo, 6 de septiembre de 2009

Pequeñas Citas

Pequeñas citas que, en el fondo, dicen mucho. Me dicen mucho:

-El verdadero Infierno es levantarse en las mañanas y decir: "¿Para qué?" (Marv-Sin Cty)

-Si ves que la vida se te viene abajo y que eres una escoria. Si ves que nada tiene sentido y estás solo. Ríe... sólo ríe y vuelvete loooooooooooco!!! (Joker-The Killing Joke)

- Existe la idea de que un tal Patrick Bateman es una especie de abstracción. Porque yo no existo de verdad, sino sólo como ente, como algo ilusorio. Y aunque pueda ocultarte mi mirada fría, si me das la mano notarás que mi carne roza la tuya e incluso tal vez intuyas que es probable que tengamos estilos de vida parecidos, pero yo, sencillamente, no estoy. (Patrick Bateman - American Psycho)

-Tengo todas las características de un ser humano: carne, sangre, piel, pelo. Pero ninguna emoción clara e identificable, excepto la avaricia y la aversión. Está ocurriendo algo horrible dentro de mí y no sé por qué. Mis sangrientas lujurias nocturnas están empezando a apoderarse de mí, me siento letal, al borde del frenesí, creo que mi máscara de cordura está a punto de desmoronarse. (Patrick Bateman - American Psycho)

-Necesito encajar en el comportamiento homicida en una escala masiva. Esto puede no ser correcto pero no tengo otra forma de satisfacer mis necesidades. (Patrick Bateman - American Psycho)

viernes, 4 de septiembre de 2009

Presiona ESC para salir


Escape. Estar en otra dimensión, fuera de lo establecido, un "no existir". Como no hay cable a tierra, nada te ata. Todo es una burda imitación de la felicidad. Pero en realidad, no existe esa mierda.

Como no hay cable a tierra, nada te ata.

Ese cable a tierra, eras tú. Si me miraras con otros ojos... si pudieses. Pero tampoco puedo obligarte. Necesito una vía de escape lo más pronto posible. Simplemente porque no veo un futuro claro, un presente estable, un pasado que se abalanza...

Me encantaría tener una válvula para huir más apropiada, pero no encuentro ton ni son en todo esto, no hay, no existe... no lo veo...

Si tan solo me dieras la oportunidad de estar en donde deseo estar...

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Prozac - Cap 17


Y llegamos a un terreno baldío que está a los pies de la Pirámide, cerca de donde yo vivía antes. Relativamente cerca, pero barrios que conocía muy bien. De pronto, al ver el cuerpo amarrado fuertemente en bolsas de basura, me di cuenta que había un solo lugar dónde hacerlo desaparecer y con qué hacerlo desaparecer.

-Vamos por parte, como decía nuestro colega Jack...

Dije, mientras comencé a cortar pedazo tras pedazo ese puto cuerpo que TANTO me había hecho sufrir y que ahora yacía eliminado, pulverizado, inerte, ante mi mirada fría, maldita, esquizofrénica, acompañado por una mujer tanto o más enferma que la que acababa de matar y que, seguramente, terminaría matándose camino a casa, por la impresión.

Había tiempo y ganas, así que luego de cortar los pedazos del cuerpo, comencé a echarle parafina y a quemarlos, tanto como fuera posible. Era un lugar apartado y nadie, absolutamente nadie llegaría a molestarnos.

Había tiempo.

Luego de ver cómo se carbonizaba todo, encontramos un chuzo en el lugar, por lo cual (siempre y en cada momento) con los guantes de cuero de vaca que compre en mis últimas vacaciones en Europa (putas como las de allá no hay en ninguna mierda de país), comenzamos a pulverizar cada trozo de osamenta o miembro que estaba en el lugar.

No digo que no fuese asqueroso.

Luego, volvimos a quemar el lugar, poniendo aserrín encima de lo que aplastamos. Y de nuevo lo hicimos, esta vez, con diarios viejos (que habían en mi departamento). Luego, comenzamos a regar el lugar, gracias a que había un pozo cerca (todas las condiciones dadas, el puto lugar era ideal).

Después, volvimos a poner aserrín, aplastar y quemamos por última vez. Después, esparcimos cal, tierra de hoja, dejamos parejo el lugar (que era amplio, por ende difícil de rastrear) y listo. Lo contemplamos un pequeño instante.

No podía creer lo que acababa de hacer. Era ella a quién maté. Lloré, lloré y no pude dejar de llorar, mientras reía y lloraba y mi secretaria se fue al auto, prendió un pucho, lo fumó y también lloraba en el auto, sentada...

Caí de rodillas y lloré y reí y reí y lloré...

-Seca esas lágrimas (me dijo sollozando mi secretaria) y vámonos a casa...